La profesora de colegio Pío XII de Santiago, María García Quintas, la empresa biomédica Keramat y la Asociación Cultural Rosalía de Castro de Cacheiras, fueron los galardonados en esta edición. En la gala de entrega organizada por la Fundación Down Compostela en el Hostal de los Reyes Católicos, los jóvenes con trisomía 21 tuvieron un papel protagonista.
Carlota Rodríguez fue la encargada de dar la bienvenida a todos los asistentes y presentar a la conductora de la gala, la periodista Silvana Moril. La joven envió uno de los mensajes importantes de la noche en favor de la integración “es importante que toda la sociedad, que todos vosotros, toméis conciencia de que sin vuestra ayuda e implicación, la normalización de la vida de las personas con discapacidad nunca será completa”.
Carla Lojo, alumna de los cursos que imparte la asociación Rosalía de Castro, presentó el premio al colectivo y resumió, en primera persona, los motivos de este galardón: “En este grupo de baile y pandereta, para bailar, nosotras somos una más; para tocar, nosotras somos una más; y para actuar, nosotras somos una más. Esto, sí es inclusión”. La vocal de la Junta directiva de la asociación, Carmen Leborán, que recogió el premio, apeló a la “normalidad que poco a poco se va estableciendo para las personas con discapacidad” y se incluyó entre el colectivo con discapacidad para concluir que “nosotros nos vemos como uno más en la sociedad y queremos nuestros sitios en ella y nuestros derechos”.
Carmiña Romero tomó la palabra para hablar de su profesora, María García Quintas, docente de audición y lenguaje del colegio Pío XII de Santiago, que dio clase a gran parte de los jóvenes que conforman la Fundación Down Compostela. Por su parte, María García, que mostró su agradecimiento a sus alumnos y a Down Compostela, insistió en que “he tratado de demostrar que es posible lograr la inclusión real de los alumnos con discapacidad intelectual en general y con síndrome de Down en particular”.
El último galardón de la noche, otorgado a los laboratorios farmacéuticos Keramat lo presentó Javier Prieto, que relató el trabajo de la empresa en favor de la inclusión laboral de las personas con síndrome de Down. El consejero delegado de Keramat, Miguel Souto, recogió el premio de manos de su empleado Francisco Fianza y se dirigió a las empresas para pedirles “que pierdan el miedo a emplear a personas como Fran, con una altísima profesionalidad. No se van a arrepentir”. Además insistió en la idea de que “la labor que realizan los premiados de hoy debería ser lo normal” y bromeó añadiendo: “por eso en un primer momento no entendíamos por qué nos premiaban”.