Autonomía personal y oportunidades laborales. Ambas reivindicaciones se convirtieron el pasado lunes en objetivos irrenunciables en boca de los participantes en la gala de entrega de los Premios Down Compostela que la Fundación compostelana entrega cada año a las instituciones, entidades y personas que contribuyen a “mejorar la calidad de vida de las personas con Síndrome de Down y discapacidad intelectual”. La quinta edición de los galardones, celebrada en el Hostal de los Reyes Católicos, se convirtió un año más en un llamamiento colectivo a la inclusión social y el reconocimiento de los plenos derechos individuales, laborales y jurídicos de las personas con trisomía 21 para poder disfrutar de “ser independientes, como todos los demás”, en palabras de Juan Martínez, presidente de la entidad.
El Parador de la capital gallega acogió a un centenar de autoridades y vecinos de la ciudad, entre ellos el Conselleiro de Sanidade de la Xunta de Galicia, Xesús Vázquez, y el alcalde compostelano, Martiño Noriega, en la gala conmemorativa del Día Mundial del Síndrome de Down que el pasado lunes se celebraba internacionalmente.
La quinta edición de estos premios sirvió también, como en años anteriores, para ensalzar el trabajo de ciudadanos, instituciones y entidades empresariales que hacen posible la inclusión en condiciones de igualdad de las personas con trisomía 21. En esta edición, los tres galardones que anualmente otorga la Fundación Down Compostela recayeron en el Concello de Rianxo, la empresa Leroy Merlín y el profesor José Antonio Rey, que recogieron sus premios, obra escultórica del artista Cándido Pazos, de manos de los miembros de la fundación, que fueron los auténticos protagonistas de la velada.
La gala
El joven Óscar Carril fue el encargado de dar la bienvenida a todos los asistentes junto al conductor de la gala Ramón Castro. Ambos dieron paso al vídeo de presentación de la Fundación Down Compostela, que dio a conocer a las personas que forman parte de ella y la labor que realizan.
Tras la proyección, María Esperante subió al escenario para introducir al primer premiado de la noche, el Concello de Rianxo, en cuya biblioteca trabaja desde hace 9 años. “Las personas con discapacidad intelectual necesitamos ayuda de las instituciones para mostrar nuestras capacidades a la sociedad”, recordó. A continuación, Kevin Suárez hizo entrega del galardón al alcalde del municipio, Adolfo Muíños, que agradeció el reconocimiento a “toda la Corporación” y reivindicó “que se eliminen las barreras legislativas con las que nos encontramos los ayuntamientos, especialmente los pequeños, para poder seguir contratando a personas como María que dan vida al Concello y son trabajadores calidad que hacen un ayuntamiento mejor”.
Para la entrega del segundo galardón, Iván Iglesias fue el encargado de presentar la labor que la empresa Leroy Merlín, en la que trabaja, realiza para la integración en el mercado de las personas con Síndrome de Down. “Con mi trabajo en Leroy Merlín yo demuestro cada día lo importantísimo que es tener un empleo para poder ser independiente. Empresas como la mía son muy necesarias”, recalcó. Su compañero, Daniel Pombo hizo entrega del premio a Julio Rodríguez, director de Leroy en Santiago, quien, en un emotivo discurso, subrayó que “pese a que pueda parecer que somos nosotros los que aportamos a este colectivo, es mucho más lo que recibimos de ellos”.
El tercer y último premio llegó de manos de Cristina Villar y Carlos Ballesteros quienes agradecieron el trabajo que el profesor de golf José Antonio Rey Pazos realiza en el Real Aeroclub de Santiago para iniciar a los jóvenes de la fundación en este deporte. “José Antonio es una persona muy especial gracias a la cual hemos aprendido lo que es un swing y que, un ratito a la semana, nos hace sentir como Severiano Ballesteros”, aseguraron. El galardonado aprovechó su intervención para mostrar su emoción y agradecimiento “por este doble premio: el galardón y la confianza en mi para dedicarme a los miembros de la fundación”. Así mismo dedicó el premio a sus alumnos “porque el golf les aporta valores, claro, pero sobre todo son ellos los que aportan muchos valores al deporte”.
Tras la entrega de los premios, el grupo de Teatro Down Compostela, dirigido por Lucas Herrador, tomó el escenario para sorprender al público con un sketch de su obra “Búscame a ese tipo”, que se estrenará el próximo mes de junio en el Salón Teatro de Santiago.
Intervenciones institucionales
Después del caluroso aplauso para los artistas llegó el turno de intervenciones institucionales que abrió el presidente de la Fundación Down Compostela, Juan Martínez. En su discurso recordó la necesidad de “aprovechar todo lo que conseguimos en los últimos años con la inclusión educativa, con una ley de integración que ahora vemos peligrar con la nueva LOMCE”. Así mismo recordó la importancia de la concienciación de toda la sociedad, empezando por los propios padres de las personas con Síndrome de Down, “para convencernos de que con algunos apoyos, los chicos con trisomía 21 pueden tener una vida independiente como cualquier persona de su edad”. Martínez recordó también los apoyos recibidos por parte de instituciones públicas como el Concello de Rianxo, la Xunta de Galicia, la Diputación de Pontevedra o el Complejo Hospitalario de Santiago para la integración laboral de las personas con trisomía 21 y discapacidad intelectual. “Para nosotros este es el camino adecuado. La colaboración entre las administraciones públicas, las empresas privadas y el tercer sector permitirán mejorar la calidad de vida de las personas con Síndrome de Down y que se haga realidad su aspiración de tomar sus propias decisiones, como reclaman desde hace tiempo”.
En representación de la Xunta de Galicia, intervino, a continuación, el conselleiro de Sanidade, Xesús Vázquez, que agradeció “como conselleiro pero sobre todo como persona el trabajo y esfuerzo” que realiza la Fundación Down Compostela. “Premios como este contribuyen a concienciar sobre las necesidades de las personas con Síndrome de Down y en ese camino podeis contar con nosotros”, señaló.
Finalmente, el alcalde de Santiago cerró la ronda de discursos. Martiño Noriega ensalzó “a las personas que están detrás de proyectos como este” y mostró su deseo de que “llegue el día en que no tengamos que premiar la integración”. “Gracias por vuestras lecciones de vida y por ser un ejemplo a seguir. Estamos orgullosos de vosotros”, recalcó en referencia a las personas que conforman Down Compostela.
Para la despedida de la gala volvieron al escenario los premiados junto a los miembros de la Fundación para una foto de familia que puso el broche de oro a una noche en la que volvió a quedar de manifiesto que, como afirma el lema que conmemora el Día Internacional del Síndrome de Down, “la vida no va de cromosomas”.