La Fundación Grupo Norte respaldará económicamente el proyecto ‘Empleo con apoyo’, impulsado por Down Galicia y que tiene como objetivo facilitar a las personas con discapacidad intelectual, especialmente aquellas con síndrome de Down, su incorporación sociolaboral en el mercado ordinario garantizando para ello todos los apoyos que tanto la persona, la familia como el empleador necesitan. Así se establece en el convenio firmado por el presidente de Down Galicia, Delmiro Prieto, y el de la Fundación Grupo Norte, Javier Ojeda, en un acto que también ha contado con la participación de la conselleira de Trabajo y Bienestar, Beatriz Mato, de la secretaria xeral de Política Social, Coro Piñeiro, y de una de las personas participantes en el programa, Pamela Casagrande.
El acuerdo contempla que la Fundación Grupo Norte donará a la Federación 50.000 euros a lo largo del año 2014 para facilitar la inclusión de personas con síndrome de Down, contemplando entre sus actividades prioritarias la formación, orientación y asesoramiento en el ámbito laboral. Este convenio es fruto de la convocatoria de Proyectos Solidarios que la Fundación Grupo Norte convoca a nivel estatal y en la que Down Galicia resultó ganadora con su programa de empleo, después de superar un proceso al que han concurrido 85 proyectos sociales de 13 comunidades autónomas y resultar el elegido por los propios trabajadores de Grupo Norte en votación secreta y electrónica.
El proyecto cuenta además con el importante compromiso económico de la Consellería de Traballo e Benestar de la Xunta de Galicia, que desde el año 2002 financia la mayor parte de los costes de personal mediante una subvención prorrogable.
Destinatarios del proyecto
Los destinatarios del proyecto ‘Empleo con Apoyo’ son personas con discapacidad intelectual en general y síndrome de Down en particular con una cualificación de minusvalía superior al 33% según la legislación vigente, mayores de 16 años y residentes en la Comunidad Autónoma de Galicia. El acceso al mercado laboral de las personas que forman parte de este colectivo resulta especialmente complejo presentando tasas de paro del 90% en hombres y 99% en el caso de las mujeres.
La importancia de este proyecto reside en el hecho de que la integración laboral de las personas con discapacidad en el sistema ordinario de trabajo sigue suponiendo hoy en día un reto para la sociedad. Hasta hace unos años, las personas con síndrome de Down o discapacidad intelectual en general, se han mantenido al margen de toda actividad laboral competitiva y, por extensión, de otros muchos ámbitos de la sociedad. Su falta de formación específica, ausencia de expectativas laborales y desconocimiento de otras realidades, impedía que se integraran plenamente en el mundo laboral.
En la actualidad, y fruto de los esfuerzos de las familias y de las organizaciones sociales, los usuarios desean alcanzar un trabajo al considerarlo un espacio de reconocimiento público básico para la construcción de un rol activo y participativo. Un trabajo supone ocupar un lugar en la sociedad: la meta de cualquier ciudadano adulto, ya que gracias a él se pueden alcanzar grandes cuotas de autonomía y de independencia, además de la económica con el acceso al trabajo.